Gandra
A pesar de las grandes transformaciones que sufrió a lo largo de los siglos, la Iglesia Parroquial de Gandra presenta algunas características que parecen apuntar hacia un origen románico. El templo actual data del siglo XVII y está dedicado a San Martín. Se trata de una construcción en albañilería, sin revoque o pintura. En el lado sur, en el ángulo del cuerpo principal con una de las capillas laterales, está adosada la sacristía. En la empeña norte está erigida la torre campanario. La fachada principal deja ver una rosácea cuadrilobulada que culmina en cruz. También las capillas laterales ostentan rosáceas del mismo tipo. Dentro asegúrese de admirar los altares dorados, en el mejor barroco portugués. En vista de la iglesia está el crucero parroquial. La fecha de 1116 aparece inscrita en el bloque de base. El fuste es una columna lisa en la parte superior de la cual asienta un capitel nervado y una cruz trilobada.
La fachada de la Capilla de la Señora Guadalupe es austera, rasgada sólo por dos pequeñas ventanas y por la puerta principal, coronada por una ocular circular. El frontón triangular, con pináculos en los ángulos, remata esta fachada, acentuando esa cara de rigorismo oitocentista. Sobre el borde sur hay una pequeña campana, está de sabor renacentista. En el lado opuesto, adosada al norte, se erigió una amplia sacristía. En el interior vale la pena admirar los techos estucados y el altar mayor, en gusto del Renacimiento, con la imagen setecentista de Nuestra Señora de Guadalupe al centro.